Rotondas: el descuido más peligroso
Estas son las situaciones de riesgo que provocan cinco de las infracciones más comunes y peligrosas que se cometen en las rotondas.
Uno de cada tres conductores implicados en accidentes en rotondas cometió alguna infracción, principalmente incumplimiento de prioridades, exceso de velocidad e incumplimiento de las distancias de seguridad, según datos de la DGT de 2020 (ver recuadro).
PRIORIDAD. Entre todos, las infracciones de las normas de prioridad son las más frecuentes en las rotondas, una de cada cinco. Y es que, como explicamos en el primer capítulo de esta serie, la regla principal establece que los vehículos que circulan dentro de la rotonda tienen prioridad sobre los que acceden a ella (siempre que una señal -señales de semáforo, señales de tráfico- o un agente no ordene lo contrario) .
Así, entrar en un espacio circular sin respetar el derecho de paso de los demás conductores puede provocar frenadas bruscas, colisiones o incluso colisiones entre vehículos.
Asimismo, salir de la rotonda desde un carril interior, cruzando por delante de otros vehículos, también puede tener graves consecuencias: “Es quizás la maniobra más peligrosa que puede realizar un conductor dentro de una rotonda. Una maniobra ilegal que, combinada con un exceso de velocidad y una colisión en curva, puede comprometer la estabilidad e incluso provocar el vuelco de uno de los vehículos implicados”, explican desde el área de formación de conductores de la DGT. Un delito que incluso podría considerarse delito y castigarse con pena de prisión si existe una conducta temeraria que ponga en peligro la vida de una o varias personas.
A TODA VELOCIDAD. El exceso de velocidad también es causa de numerosos incidentes en estas rotondas: el 8% de los conductores implicados en accidentes en las rotondas interurbanas cometieron exceso de velocidad.
Sabemos que reducir y adaptar la velocidad son las precauciones básicas al acercarse a una rotonda: “Estamos en un tramo de vía que no está diseñado para circular a alta velocidad. El exceso de velocidad en una rotonda impide que otros vehículos entren y cambien de carril, les obliga a invadir varios carriles para controlar el vehículo y aumenta los riesgos y la gravedad de los accidentes. Y también el riesgo de atropellar a los peatones que podrían cruzar la vía a la salida de la rotonda”, destaca Formación de Conductores.
CAMBIOS DE CARRIL. Muchas de las infracciones habituales en las rotondas se producen circulando dentro de la misma: indisciplina de carril, cambio de carril sin utilizar los intermitentes, ni respetar las prioridades, ni las distancias de seguridad. Infracciones que además dificultan la conducción a otros conductores y provocan multitud de frenadas intempestivas y colisiones entre vehículos. “El uso del carril en una rotonda es como cualquier otro tramo de la vía. Ocuparemos el carril derecho, fuera de la ciudad, y el que mejor se adapte a nuestro destino en un entorno urbano. Y cambiaremos de carril siempre siguiendo dos reglas básicas: respetar la prioridad de quienes ya lo están cruzando y señalizar la maniobra con la antelación suficiente para no sorprender al resto de conductores”, subrayan desde Formación de Conductores de la DGT.
Por último, en las rotondas se debe prestar la máxima atención a la presencia de usuarios vulnerables, como ciclistas y automovilistas: respetar su prioridad en las salidas, entradas y cambios de carril y mantener una distancia adecuada con ellos es fundamental, porque son los usuarios más difíciles. de detectar y más frágiles en circulación.
SU ACCIDENTALIDAD
Totales:
7.104 accidentes con víctimas, de los cuales 2 de cada 3 en vía urbana.
61 fallecidos, 32 en vías interurbanas y 29 en vías urbanas.
433 heridos graves, incluidos 2 de 3 en zonas urbanas.
12.332 conductores involucrados en accidentes, de los cuales 2 de cada 3 en vías urbanas.
En la carretera:
El 20% no respetó las normas y señales de prioridad.
El 8% cometió una infracción por exceso de velocidad.
En la ciudad:
El 19% no respetó las normas y señales de prioridad.
El 5% no mantuvo la distancia de seguridad.